Joel Saucedo
La reforma política del Distrito Federal marcará al jefe de Gobierno,
Miguel Ángel Mancera como el gran impulsor de la transformación de la capital
del país, cosa que no pudieron concretar Cuauhtémoc
Cárdenas, Rosario Robles, Andrés Manuel López Obrador, Alejandro Encinas y
Marcelo Ebrard.
Algunos analistas
pretendieron ubicarlo como el artífice de la iniciativa para despenalizar el
consumo de la mariguana en la ciudad de México, lo cual sería el sello de su
gobierno tal y como a López Obrador
lo hizo con la Pensión Universal y Marcelo
con la legalización del aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Eran finales del 2013 y
el doctor Mancera –quien no está
afiliado al PRD-, les habló de manera contundente a los 34 legisladores del
partido del sol azteca: déjense de mariguanadas. Esto en torno a lo que ya se
veía venir con la presentación de la iniciativa para legalizar el consumo del
enervante.
Durante un encuentro
con un grupo de asambleístas, el secretario de Gobierno, Héctor Serrano, llamó la atención de los representantes de los
capitalinos en el sentido de que la administración mancerista estaba a favor de
abrir el debate, lo que no necesariamente implicaba estar de acuerdo en regular
el uso personal de cannabis.
Sin embargo, este
miércoles en el viejo Palacio del
Ayuntamiento, el mandatario capitalino le dio una vuelta magistral al tema
y de paso enterró la discusión, al solicitar a diputados y jefes delegacionales
respaldar su iniciativa de reforma política enviada al Senado de la República.
El pasado 14 de agosto
de 2014, el gobernante de la ciudad entregó al consejo rector del Pacto por México su iniciativa, misma
que estuvo a punto de ser dictaminada durante la última sesión del pasado
periodo ordinario de sesiones de la Cámara Alta.
Hoy –jueves 20 de
febrero-, Mancera acudió al recinto de Reforma e Insurgentes y se reunió con
los coordinadores parlamentarios del PRI, Emilio
Gamboa Patrón; del PAN, Jorge Luis
Preciado y del PRD, Miguel Barbosa,
así como con el presidente del Senado, el priista Raúl Cervantes.
Del recinto senatorial,
Mancera salió con la seguridad de que en los próximos días habrá de
dictaminarse la reforma política del Distrito Federal, la cual deberá ser
enviada a la Cámara de Diputados para solventar el trámite correspondiente.
Una vez que los diputados
aprueben la reforma, ésta será enviada a los 31 estados de la República, debido
a que el proyecto incluye modificaciones a los artículos 40, 41, 43, 44, 71,
76, 122, 124 y 135 de la Constitución.
Se estima que en un
plazo no mayor de seis meses, al menos 17 Congresos estatales, habrán aprobado
la reforma política capitalina, sobre la cual la Asamblea de Representantes del
Distrito Federal carece de facultades precisamente por no ser Congreso.
La iniciativa establece
que el Distrito Federal contará con una Constitución, que a su vez definirá la
manera en que la ciudad interactuará con la Federación, así como su
nomenclatura y los nombramientos del procurador general de justicia y del
secretario de Seguridad Pública.
Pero hasta el momento,
no se ha definido con claridad cómo se llevará al cabo la Asamblea
Constituyente del nuevo Congreso; existen dos propuesta: la primera, que sean
electas dos asambleas para el 2015, una constituyente y la otra con los
diputados que integrarían el nuevo Poder Legislativo.
Dicho proyecto todavía
guarda discrepancias debido a que podría generarse una confusión entre los
electores al momento de votar por el doble de diputados, observación que dejó
en la mesa Porfirio Muñoz Ledo al
reunirse con senadores, diputados federales y locales, y jefes delegacionales
al inicio de esta semana.
Lo que se tiene avanzado
es que las delegaciones pasarían a ser alcaldías, pero en lugar de cabildos
tendrían consejos, lo cual no ha sido del todo bien visto por los principales
actores tanto políticos como autoridades de la ciudad.
Eso es lo que se tiene
hasta el momento en el Senado de la República, en esta histórica reforma política
para el Distrito Federal. En los próximos días el tema desplazará la discusión
sobre la iniciativa de despenalizar el consumo de mariguana, cuya propuesta no
tiene futuro, pues carece de pies y cabeza.
Twitter: @JoelSaucedo
saucedosj@yahoo.com.mx