La presunta presencia de integrantes del grupo criminal Los Caballeros Templarios en el Senado de la República el pasado 17 de octubre, desató un brete mediático que inmiscuye a Luisa María Calderón, hermana del ex Presidente Felipe Calderón.
De hecho, la senadora oriunda de Michoacán y donde fue candidata perdedora en la última elección que dio el triunfo al priista Fausto Vallejo, fue quien inició el escándalo al denunciar sin mayor sustento a los asistentes a una reunión con la Comisión de Seguridad Pública, encabezada por Omar Fayad.
Calderón Hinojosa, Fayad Meneses, Raúl Morón y María del Rocío Pineda Gochi, fueron los cuatro legisladores que sostuvieron un encuentro con una comisión de manifestantes miembros de “Michoacán Paz y Dignidad” y “Por la Defensa y la Paz de Apatzingán”.
Sin embargo, la ex candidata del PAN se sorprendió cuando uno de los asistentes se dirigió al senador Fayad, diciéndole “…desde que el Presidente Calderón nos declaró la guerra…”. Esto fue suficiente para que la legisladora se pusiera en alerta. “¡Hay Dios! Esto es grave”. La cuestión es que se quedó callada un mes.
Calderón dijo que en esos momentos le solicitó a Fayad no recibir a los manifestantes, pues tenía la sospecha de que eran enviados por Los Templarios, pero la reunión se concretó sin llegar a mayores en esos días.
Fue hasta que la senadora de Acción Nacional sacó a la luz pública que los supuestos integrantes de la delincuencia organizada, habían ingresado al recinto de Reforma e Insurgentes y sostenido un encuentro con los citados representantes populares.
Lo anterior obligó a que el presidente de la Cámara Alta, el priista Raúl Cervantes instruyera a la representación jurídica del órgano legislativo a presentar una denuncia contra quien resulte responsable.
En el marco del informen de Ernesto Cordero –quien aspira a dirigir al PAN-, Cocoa fue presionada por los reporteros para que abundara en torno a las acusaciones. Solo atinó a responder que acudiría a declarar si es que era llamada por la PGR.
Luego, el lunes 24 de noviembre los michoacanos ofrecieron una rueda de prensa a unos pasos del Senado de la República, en donde anunciaron que se reservaban su derecho a proceder por la vía penal o civil en contra de Luisa María Calderón.
Tito Fernández Torres, quien encabeza a “Michoacanos Paz y Justicia”, acusó a la panista de promover la creación de las guardias comunitarias, y dijo que estaba dispuesto a demandarla, incluso a impulsar su desafuero.
“Voy a ir contra ella, hasta las últimas consecuencias”, advirtió Fernández Torres, un ex funcionario del Distrito Federal inhabilitado por 10 años luego de haber realizado compras no autorizadas. “De ser necesario impulsaré un juicio de procedencia para quitarle el fuero”, recalcó.
El senador albiceleste, Roberto Gil Zuarth, calificó la reacción de Tito Fernández como absolutamente injustificada. “No le damos mayor crédito a esas sugerentes amenazas”, consideró el compañero de bancada de Cocoa.
Por lo pronto este martes 26 de noviembre, integrantes de las bancadas del PAN y del PRD en el recinto senatorial, se sentarán a revisar un plan de acción conjunto para determinar los pasos a seguir en el caso Michoacán.
Lo cierto es que las cosas no deben quedarse en el ámbito mediático. Luisa María Calderón acusó al grupo de michoacanos de pertenecer a Los Caballeros Templarios. La PGR ya investiga la denuncia, por lo que de un momento a otro tendrá que llamarla a declarar.
La hermana de Felipe Calderón deberá presentar las pruebas que la llevaron a realizar dicha acusación, pues de lo contrario cobrará fuerza la amenaza de quienes negaron formar parte de las filas de esa organización delictiva. Solo es cuestión de esperar.
PUNTO Y SEGUIDO… Si es que los supuestos manifestantes son integrantes de Los Caballeros Templarios, esta no sería la primera ocasión que el Congreso Federal permite el acceso a sus instalaciones a personajes presuntamente ligados al crimen organizado. Escondido en la cajuela de un vehículo, el 24 de septiembre de 2010, César Godoy Toscano ingresó a la Cámara de Diputados y rindió protesta como diputado federal del PRD por el Distrito I con cabecera en Lázaro Cárdenas, cuyo puerto de gran calado, ahora está en manos del Ejército y la Marina. Al medio hermano del entonces gobernador de la entidad, Leonel Godoy Rangel, se le acusaba de tener nexos con La Familia Michoacana. En aquella ocasión y para entrar al recinto de San Lázaro, Godoy Toscano fue auxiliado por sus correligionarios Mary Telma Guajardo y José Narro. Sin embargo, a los tres meses, específicamente el 15 de diciembre de ese año, el pleno de la Cámara Baja lo desaforó y separó al cargo. A la fecha no se sabe nada del paradero del primo de Leonel Godoy… EN DÍAS PASADOS, el coordinador de los diputados del PAN en Michoacán, Alfonso Martínez Alcázar se pronunció en contra de la postura de su partido en San Lázaro para desaparecer los poderes de la entidad debido a la situación que prevalece. Martínez Alcázar dijo que la entidad requiere del apoyo de la Federación, por lo que un planteamiento de esa naturaleza no resolverá la problemática del estado. El pasado 21 de noviembre, la fracción de Acción Nacional anunció que esta semana presentaría una iniciativa de reforma a la Constitución, con el fin de decretar la desaparición de Poderes en la entidad.
Twitter: @JoelSaucedo
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Excelente¡¡
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