Joel Saucedo
Cuando ya se vislumbra el fin de sexenio, el Presidente Calderón ejecutó cambios motivados por la carencia de figuras que garanticen el triunfo en el 2012 al Partido Acción Nacional.
El ex secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, decidió irse irresponsablemente del cargo atraído por el canto político de las sirenas hacia una lucha electoral para la que solo cuenta con su pasado de burócrata.
Ante figuras como Andrés Manuel López Obrador, Enrique Peña Nieto e incluso frente a sus correligionarios Santiago Creel y Josefina Vázquez Mota, no parece que tenga muchos recursos para derrotarlos.
Sin embargo no es el único caso, en el pasado Miguel de la Madrid, secretario de Programación y Presupuesto, fue también tecnócrata y José López Portillo en los setenta Secretario de Hacienda.
Ahora Ernesto Cordero sale de la misma dependencia en momentos en que se avecina una crisis financiera. Se dijo responsable de haber cumplido. Pero el ciudadano de calle, me preguntó: ¿Qué hizo? ¿Quién es?
Lo que motiva a Felipe Calderón a impulsar a su ex secretario de Hacienda no es la urgencia de enfrentar la crisis que se avecina, sino la de ganar las elecciones para un tercer sexenio panista.
Otra prioridad de imponer a Cordero en la máxima magistratura es la necesidad de cubrir huecos financieros de una administración calderonista que lejos de generar crecimiento y empleo, se caracterizó por el desvío de recursos y los subejercicios presupuestales.
Cordero puede ser, pues, otro dolor de cabeza para el país, pero ante el combate perdido frente al crimen organizado y el descrédito ante los electores panista por la falta de programas sociales efectivos, Calderón ha cerrado los ojos.
De hecho, todos los funcionarios presentados en el evento de cambios en el gabinete, mostraron una actitud triunfalista. Ellos se prodigaron reconocimientos, sin sustentar por qué.
Felipe Calderón, quien se presumía como hombre de Estado cayó en los mismos errores que los gobiernos priístas de nombrar a sus cuates en funciones estratégicas, vitales para el país y de las cuales no tienen idea.
Es el caso de Jordy Herrera quien fungió como secretario particular del ahora titular del Poder Ejecutivo durante su gestión al frente de Banobras. Así se explica el ascenso del funcionario a tan alta investidura.
Con eso le da razón de sobra a sus opositores quienes a lo largo del sexenio lo han criticado por tener un gabinete de cuotas y de cuates. De hecho, difícilmente ha conseguido ubicar a estadistas al frente de las carteras de nivel como en su momento lo hicieron verdaderos hombres de Estado como Lázaro Cárdenas.
Los cambios ejercidos este fin de semana no tienen más explicación que fines electorales. En el caso de Ernesto Cordero es de sobra conocido que es un aspirante mediocre. Y eso está demostrado en las encuestas que lo ubican en el último lugar entre los precandidatos.
José Ángel Córdova es otro caso que tiene como mayor activo el haber enfrentado el virus de la influenza humana. Sin embargo, tendrá que enfrentarse al grupo yunquista en Guanajuato para lograr su postulación, lo cual se ve harto complicado.
Mientras el país se encuentra sumido en una vorágine de violencia y desempleo, incluso a la puerta de una nueva crisis económica, Calderón está más empeñado en conservar el poder para Acción Nacional totalmente inmerso en el proceso electoral de 2012.
PUNTO Y SEGUIDO… LOS PROBLEMAS, están de sobra en el Senado de la República. Resulta que el jueves, un corto circuito causó un incendio en un puesto callejero de birria. El propietario resultó con quemaduras de primer grado en brazo y rostro. Aquí, el delegado en la delegación Cuahutémoc, Agustín Torres, tiene mucho qué explicar. Sus muchachos cobran día y noche exorbitantes recursos a los comerciantes ambulantes para permanecer instalados a las afueras de la flamante la Cámara de Senadores… POR CIERTO, el pago realizado a los empleados de ese recinto legislativo fue discriminativo, porque le fue otorgado a una mínima parte de empleados. Son fuertes las voces de altos funcionarios que atribuyen tal actitud a las necesidades de la Cámara Alta para destinar recursos a los trabajos inacabados de la nueva sede. Es decir, buscan ahorros a costa de los empleados, cuando los senadores y servidores públicos se dan la vida de virreyes. Ejemplos hay de sobra… EXISTE EL RIESGO de que la Ley de Seguridad Nacional, sea objetada por las secretarías de la Defensa y Marina, en caso de que se apruebe una reforma acotada. Fuentes castrenses de alto nivel advirtieron que en caso de que la aprobación de la polémica legislación sea aprobada de distinta manera, ordenarían a las tropas regresar a sus cuarteles. Eso no significaría otra cosa que una rebelión del Ejército ante la incertidumbre jurídica que padecen desde que inició el combate al crimen organizado… EL DESPIDO de Martí Batres, al frente de la Secretaría de Desarrollo Social, no es otra cosa del deslindamiento del jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, de su antecesor Andrés Manuel López Obrador, quien tenía como alfil al muchacho de René Bejarano. Con esta determinación, el mandatario capitalino tomó distancia del tabasqueño después de que se ubicó como el preferido en las encuestas para contender por la candidatura presidencial rumbo al 2012. De hecho hay espirantes a la jefatura de gobierno en la capital del país que se preguntan de dónde saca tanto dinero el senador Carlos Navarrete. Uno de ellos confesó a SIN PROTOCOLO que sus aspiraciones están limitadas por falta de recursos. Pero sus expresiones fueron de incredulidad cuando dijo que Navarrete “trae mucho dinero”…
Twitter: @Joel Saucedo
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