Ningún aspirante a la candidatura presidencial del PAN, tiene nada qué ofrecer al pueblo de México, mucho menos cuenta con la estructura y el equipo para poder competir ya sea con Enrique Peña Nieto, Andrés Manuel López Obrador o Marcelo Ebrard.
Vamos por partes. Ni siquiera Santiago Creel Miranda, el más aventajado de los panistas, tiene una estrategia política municipal o estatal para competir por el máximo cargo nacional.
De hecho, Creel es un perdedor. En el 2000, compitió para jefe de gobierno y perdió ante López Obrador. En el 2005, renunció a la Secretaría de Gobernación y le arrebató la candidatura el ahora Presidente Felipe Calderón.
La diputada Josefina Vázquez Mota, tampoco posee un núcleo político que le permita por si sola catapultarse como fuerte candidata. Carece de los “amarres” en el interior del país.
Vázquez Mota arribó al gabinete de Vicente Fox por mera casualidad. El guanajuatense la hizo secretaria de Desarrollo Social y pensó que podía aspirar a sucederlo, pero terminó como coordinadora de campaña de Calderón.
Pero más grave aún, ¿qué ha hecho Vázquez Monta por el país en esta supuesta etapa de la alternancia? Se desconoce obra alguna de su autoría. Es más, poco figura en los principales noticieros y primeras planas de los diarios.
El más reciente destapado, Alonso Lujambio, cometió el error de treparse a la ola democrática foxista cuando ésta está por diluirse. Se le ha hecho fácil decir que tiene posibilidades y desea la candidatura. El pueblo se ha de preguntar ¿a cambio de qué?
Los niveles educativos a nivel nacional, están peor que nunca. México tiene el último lugar de todos los integrantes de la OCDE. Incluso, su gestión da la impresión de responder solo a los intereses y designios de la maestra Elba Esther Gordillo.
El actual secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón es otro de los que sueña con ser elegido. Nadie le conoce ningún argumento de peso que le permita tener la razón en cuanto a sus aspiraciones en ese sentido.
De hecho, cuando se ha presentado a comparecer ante legisladores, ni siquiera es capaz de verlos a los ojos. ¿Qué ha hecho por los trabajadores del país? ¿Acaso ha levantado la voz para mejorarles el poder adquisitivo? ¿Alguien se imagina qué haría si fuera Presidente?
El gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez, es otro de los que aspira a la candidatura, pero la principal duda estriba en que su capital político en la entidad le pueda alcanzar en el plano nacional.
Lo cierto es que la falta de liderazgos, cuadros políticos y del servicio público, estructura partidaria y carencia de sectores corporativos –obrero, popular y campesino-, no le permitirán a Acción Nacional dar la pelea que desea.
El único sustento sólido que tendrá el que surja como candidato, es el de haber pertenecido al gabinete o núcleo cercado de Felipe Calderón. Entonces, tendrá la posibilidad de aparecer en la radio y la televisión por los “cañonazos” de spots a los que tendrá derecho el PAN durante la contienda.
Sin embargo, eso no será suficiente, pues ninguno de los mencionados –reitero- tiene la capacidad para cubrir con su equipo la totalidad de las casillas que se instalarán durante la contienda.
Y en eso, sobra decir, el PRI tiene experiencia registrada. En tanto que López Obrador, se ha dedicado desde el 2006 a consolidarla en sus incansables viajes por el territorio nacional. ¿Y los panistas? ¿Será que solo esperan la oportunidad, como ha sido su naturaleza?
Es más, ni el secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, quien aparentemente es el candidato de Calderón, tendría la mínima posibilidad de alzarse con el triunfo. Pero los detalles al respecto, formarán parte de otra entrega.
PUNTO Y SEGUIDO… En el Senado de la República hay expectación porque de un momento a otro llegue la terna del Presidente Calderón sobre el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que deberá ocupar la bacante de José de Jesús Gudiño, fallecido el pasado 10 de septiembre. Hasta el momento, sólo ha sido mencionada como integrante de la segunda propuesta, a María del Carmen Alanís, actual titular del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF)… El coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete, ya tiene candidato a la presidencia y se llama Marcelo Ebrard. Eso sale a colación porque en días pasados divulgó uno más de sus comunicados de tinte electoral, en el que calificó de “exitoso” el trabajo del gobierno del Distrito Federal. Incluso se dijo satisfecho porque administraciones priistas y panistas han tratado de imitar la forma de gobierno de su partido en la capital del país. Así o más claro… Y quien tiene ganas de competir con Luisa María, la hermana de Felipe Calderón por el gobierno de Michoacán, es el senador del PRD, Silvano Aureoles Conejo. Sin embargo admitió que en estas cosas “no hay enemigos pequeños, ni contrincantes fáciles”. Y aseguró que cuenta con experiencia para ello… A principios de febrero, el Senado de la República y la Organización Mundial de Parlamentarios contra la Corrupción Capítulo México, que preside el panista Ricardo García Cervantes, organizarán el Seminario Internacional sobre Corrupción y Lavado de Dinero con ponentes de reconocido prestigio y legisladores…
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